Fino paso.

¿Qué pasa cuando se abrazan el amor y la muerte? ¿Se muere el amor? ¿O se enamora la muerte? Tal vez la muerte moriría enamorada y el amor amaría hasta la muerte.

Cafeína para dos.

Contigo no quiero París, ni Santiago, ni Roma. Contigo prefiero quedarme en casa, tomarte de las manos y guiarte a donde jamás has viajado; ida sin retorno, amor con insomnio, cafés de madrugada y sexo por placer. Contigo hasta enloquecer.

Mátame. Nadie lo notará. Nadie lo sentirá.

En el fondo mataste a la única persona que lo daba todo por ti, fueras como fueras, estuvieras donde estuvieras y estuvieras con quien estuvieras.

Un día.

Un día conoces a una persona que anteriormente ya conocías pero con la que no tenías ningún tipo de relación. Un día de repente esa persona entra en tu vida por una sola recomendación. Un día una canción te marca. Un día, otro día y otro más y así de más a más. Un día escuchas esa canción y te recuerda a esa persona que la hace especial. Un día sonríes, te hace reír y en principio sólo eso. Un día estás feliz,  no sabes que en ese mismo instante la vida te ha cambiado para siempre, compartís historias, risas, momentos malos tantos como buenos; como si le conocieras de toda la vida. Cuando estás triste y recuerdas cualquier de sus tonterías y sonríes, es como si gracias a ella hubieras olvidado todas las cosas malas que te rodean, como si no existiera lo malo y todo fuera feliz. Un día te picas. Un día llega el primer te odio que entre línea se leía un te quiero, supongo que se sentía. Un día empiezas a hablar y hablar sin sentido poco a poco pasaban los días y hablábamos las veinticuatro horas del día y no nos cansábamos, era despertarse y empezar a hablar, al igual que era con la última persona que hablaba a la noche, tres horas sin hablar contigo eran demasiadas. Un día daba la impresión de que todo iba perfecto, parecía que nada podía salir mal. Un día te enfadas. Un día te vuelves a enfadar. Un día, comencé a darme cuenta de que no podía vivir sin ti y ya en todos los días era necesario que ocuparas el mínimo tiempo de mi día. Un día, se empieza a confundir sentimientos. Un día, empezamos a tontear. Un día, nos decíamos cosas bonitas, aunque nos hacíamos los duros.

Lo malo empieza cuando empiezas a soñar con esa persona noche tras noche y cuando te conectas únicamente para hablar con ella. Ahí te das cuenta que empiezas a tener a tener dependencia, todo pasa muy rápido, apenas te das cuenta de lo que está pasando, fuera, y en tu interior. Sientes cosas raras que jamás has sentido con personas que ves cada día.

Eran conversaciones, eran bromas, eran caricias, eran sonrisas, era felicidad, éramos nosotros, en fin todo se quedó en un –éramos-

Y aquí sigo esperando un ‘Hola, echo de menos hablar contigo’

Y ahora después de unos meses cada uno está en su camino, confió en el destino de que algún día nos vuelva a juntar si no solo tengo que decirte que gracias por estar ese pequeño tiempo en mi vida, espero que te vaya bien.

Nada es para siempre, nada.

Todo se queda en pasado, leer conversaciones viejas te enseñan que las promesas no se cumplen, que los 'para siempre' acaban en un minuto, se esfuman en el aire, que un 'no te quiero perder' es igual a un 'te olvido mañana', que las palabras escritas, escritas se quedan, que las palabras dichas mueren en el aire, que un sentimiento puede morir o siempre estuvo muerto, que quien se va  no regresa, que quien más te dice, más hiere. La vida te enseña que las cosas pueden cambiar en un abrir y cerrar de ojos.
Y cuando estás mal tus ojos se cristalizan, sientes que deberías llorar o gritar pero no puedes, te quedas callado, te tumbas en la cama y piensas. ¿Recuerdas? Solíamos hablar por horas y reírnos de todo. Y recuerda quien te merece no te hará llorar. Finalmente me cansé de esperar algo que sé que nunca ocurrirá.
 Y tal vez te preguntes ¿Por qué ya no me hablas? y la única contestación es que no voy a seguir enamorándome de algo que no tendré.
Un día dijiste que no te ibas a olvidar de mi y ya me has olvidado, que me estabas cogiendo mucho cariño y que ya se a esfumado, te caía muy bien y te jodía que estuviéramos mal y terminabas con un 'no seas tonta cielito', tenías ganas de verme y de abrazarme, que para estar bien necesitabas estar bien conmigo que te hiciera reír ¿Éra tu payaso personal?
Que si lloraba, vendrías; no merecía estar mal. Me decías'te quiero de verdad', ¿Dónde han quedado? Todas las noches aunque no enfadáramos me dabas mis 'Buenas noches pequeñaja mía''Quiero verte sonreír, tienes una sonrisa muy bonita, igual que tu cara' ¿A cuántas se lo decías? Me decías que te encantaba, que era genial, que me dirán besos de tu parte de buenas noches, que nuestras conversaciones eran de lo mejor aunque nos peleáramos cada segundo, por tonterías. ¿Qué te encantaba, que estuviera siempre detrás de ti haciendo el payaso, creyéndome palabras que eran mentira?
Decías que te importaba, que era la que más atenta estaba de ti, que contestaba todo hasta los puntos. ¿Que valorabas tú?
Antes me echabas de menos.
Empecé a saber cosas que no me gustaban, y que a la vez me jodían. Las culpas eran siempre mías por seguir ahí por mucho que me fallarás y lo malo es que lo sigo estando aquí en silencio, observando desde el exterior. Lo dije y lo vuelvo a repetir 'te importa todo una mierda, y luego vienes con tequiero' 'A joderse y aguantarse, que pena que ya no me tengas ami para cuando estás mal'
Yo era lo más transparente que podía, siempre decía la verdad mentiras tu me llenabas de autenticas mentiras. Me dijiste que no me ibas a dejar de hablar y ya van pasando los meses sin un mínimo hola. me ves rara, te rayas, te veo rayado, me rayo más y dejamos de hablar; esta era tu conclusión.
Daba la impresión que te ponías celoso, solo querías que hablara contigo mientras tu hablabas con mil.
-Nadie me quiere, pos na
+Yo te quiero
-Pero como amigo
-Tu
+Yo
-Que te quiero
...
...
Mejor guardar silencio.
Mi casita de UP me espera, adiós.

¿Has amado alguna vez a alguien hasta llegar a sentir que ya no existes?, 

¿hasta el punto en el que ya no te importa lo que pase?, 

¿hasta el punto en el que estar con él ya es suficiente, 

cuando te mira y tu corazón se detiene por un instante?. 

Yo sí...” (El diario de Noa). 

Las palabras no son hechos.

Empezamos a pedir permiso antes de robar. A esperar debajo de los puentes a los suicidas. A emborracharnos con coca cola. A pegar los corazones rotos. A inyectarles dosis de felicidad a los drogadictos. A acercar la distancias. A pegar sin ninguna fuerza. A enamorarnos cada vez que nos miremos al espejo. A soñar despiertos. A restarle importancia al odio. A sonreír 25 horas diarias. A llorar, llorar de la alegría. A pintar universos. ¿Ves que fácil es escribir el mundo perfecto? ¿Ves que difícil es que las palabras se pasen a hechos?

Si o si.

Y al final, siempre la misma historia: Todo empieza por casualidad, con una simple tontería. Después poco a poco todo va creciendo, lo que empezó como una tontería, una casualidad, se convierte en algo verdadero y bastante grande. Pero eso pasa sin que te des cuenta, puedes tardar años, meses o unos pocos días. Es entonces cuando te das cuenta que no puedes dar marcha atrás, que esa persona tiene que entrar en tu vida si o si, que lo necesitas para sonreír... Lo siguiente es; o tenerlo y ser los más felices, o ver como todo se va a la mierda y cómo caes en picado al suelo. Lo peor de estas historias es que la mayor parte de las veces pasa lo segundo y, cada historia, cada caída, es más fuerte que las demás.

De extremo a extremo.

Te pasabas horas y horas hablando con esa personas. Te levantabas, lo primero que hacías era hablarle y también era la última de la que te despedías antes de ir a dormir. Día tras día, pero derrepente sin razón alguna todo cambia y ya nada es lo mismo. Ahora todo se resumen en

 +Hola ¿Cómo estás? (sabe que estás mal)

-         Bien (no puedo más) y tú?

+ Bien (¿Por qué mientes?) .¿qué cuentas?

-Pues no mucho (en serio, me quiero morir) tú?

+ Nada, igual. (Quiero que sonrías.) 

y eso una vez a la semana, incluso una vez al mes. Terminas olvidando, aún duele.

Lo imposible.

‘’Mi cuento de hadas’’ Los cuentos desde pequeños nos han engañado, ya que de mayores sabemos que nunca fueron reales. Las hadas ¿Las ves? Por algo será. ‘’Para siempre’’ Dime que persona ha demostrado viviendo eternamente para que nos de a entender que el Para siempre sí existe. ‘

’Por ti soy capaz de lo imposible’’ Lo imposible no se puede hacer, la propia palabra lo dice ¿Por eso te pasabas la vida prometiéndome cosas imposibles, y diciéndome que por mi harías hasta lo imposible? Porque sabías que por mucho que dijeras nunca se cumpliría, pero quedaba bonito, además a mí me engañabas unos momentos y me hacías feliz. ‘’Eres mi vida’’ Las personas que dicen eso, mienten, excepto los muertos. No puedes renunciar a una persona si era tu vida, porque si no estás muerto. Más de uno, ha llamado eso a alguien, para luego deshacerse de ella. Entonces, ¿os quedáis sin vida?

 Conclusión, menos palabras, y más demostrar.

Hablamos de algo que separa.

Y son capaces de quejarse al hablar de esa distancia que hay un sábado a la mañana desde la cama hasta la cocina para poder desayunar, y que tanto cuesta. Pero no es así de simple, esa palabra y menos así de bonita. Distancia, es el enemigo que jamás se rendirá en las batallas, ya que está presente quieras o no, da igual si es cuando tú tengas más fuerzas para luchar o cuando no puedas más, va a estar ahí. Entra en tu vida de una manera o de otra. Pero lo malo no es que entre, lo malo es que nunca va a lograr salir de ahí, en algún momento de tu vida vas a encontrarte con la distancia de por medio, ya sea por un amor, por tu familia que la dejes atrás o ellos a ti, o por alguna amistad que se vaya o tengas lejos.

El problema es que su definición exacta no se basa en palabras, sino entre los miles de sentimientos que conlleva. ¿Sentimientos que tengan algo en común con la distancia? asco y el odio.

 ‘’Puta distancia’’ ¿Por qué? Es capaz de sin ser humana, hacer que te arrastres, te quedes sola, te sientas de todo menos persona, te quite la vida algo llamado ‘’Impotencia’’.

 ¿Impotencia distancia? ¿Por qué? No tienen nada en común, aparentemente. Pero van unidas, gracias a la distancia la impotencia va a ser más vital en tu vida que tu propia sangre.

Impotencia por no poder hacer nada al respecto. Porque aunque quieras hacerte la idea de que los kilómetros son simples números, esos simples números son los que crean ‘’La distancia’’.

No hablo de estar un día mal, y necesitar un abrazo, un

  ‘’estate bien, pequeña, ya verás como toda saldrá bien’’.

 No es solo un día, es una rutina diaria, la distancia se apodera de tu vida completamente, incluso algunos sustituimos la palabra ‘’Vida’’ por ‘’Distancia’’. Y es que es así, queramos o no, algo que no puedes destruir, ni olvidar, ni pasar, está ahí siempre y por mucho que hagas, no van a desaparecer los kilómetros de un día para otro, y mucho menos para siempre.

Es otro ‘’imposible’’ más.

 No todo es tan malo, se supone que la distancia es una prueba, tanto para la amistad como para una relación, pero es la prueba más difícil y dura que te puede dar la vida, no porque luches y cueste si no porque aunque luches nunca llega a nada, que sí, que están las excepciones, que una amistad/relación a distancia, dependiendo de quién seas y que medios uses, puedes comerte la distancia, e ir a ver a cierta persona. Pero es que lo difícil está  antes de eso ¿Cuántos aguantan la esperar para ausentar la distancia durante un tiempo? Las relaciones a distancia no funcionan. Las amistades es más fácil falsear a distancia, porque hay menos riesgo de que te pillen mentiras. Pocas personas, tienen la suficiente paciencia, y confianza en sí mismo para esperar a que un día esos kilómetros se pasen a centímetros, no es fácil llevar el periodo de tiempo tú solo, sin nadie que te ayude, y un montón de kilómetros en la cabeza que poco a poco te quitan la sonrisa, y poco poco lo hacen más deprisa y con un resultado más eficaz.

Supongo, que también hay algo bueno que consiguen pocos que es el ‘’Después de todo siempre hay una recompensa’’. Que suerte tienen, los que lo consiguen. Los que pueden ver la sonrisa de la otra persona cerca, el abrazarles sin pantallas de por medio que lo impidan, tiene que ser bonita la sensación de tranquilidad, seguridad y sobre todo felicidad.

Ojalá todos tuviéramos tanta suerte como esas personas, y poder conseguir lo que esperamos durante tanto tiempo, y es que aunque luchemos, no nos rindamos, al final la distancia que nos separa por kilómetros, nos acaba separan para siempre, pero no físicamente, si no sentimentalmente. Y es duro darte cuenta de que las cosas son así, debes acostumbrarte a que las pruebas con fuego no se superan. Y que de cabrones, está el mundo lleno. Al final, aprendes, que si te metes en algo que tenga que ver con la distancia, estás perdiendo el tiempo porque nunca llega a nada, no ganas, siempre pierdes, no hay comodines que te salven, ni nada que arriesgar más que tú, por eso luego pierdes todo. Y bueno...que... ¿Sabes? lo que puede matar la distancia, no lo mata un asesino. 

be free.

Dejaré de gastar los segundos del día en pensar cómo actuar de manera correcta. El hacer lo que quiero sin pensar si está bien o me va a salir mal la jugada. El disfrutar cada momentos que he creado porque he querido. Y me equivocaré, seguramente la mayor parte de las cosas que haga porque me apetezcan estarán mal, y tendrán consecuencias que me marcaran la vida, y que me dañaran por dentro y hasta en algunos casos también por fuera, y debería importarme. Me importa, claro, pero no lo suficiente como para preocuparme de crear la perfección en un momento sin arriesgarme y actuar usando la cabeza.
Los momentos sin pensarlos que marcan el día entero, e incluso el paso del tiempo de los años, son esos que hago porque quiero, cuando quiero, y porque dicen que no debería hacerlos.

Te echo mucho de menos.

La verdad, no es que me agrade esta sensación que hace que me sienta incompleta. Ni el echar de menos, no me gusta para nada, porque me hace sentirme poca cosa, no entiendo el por qué, pero me siento así. Dice que el echar de menos a alguien, te sirve para darte cuenta de la importancia, y el valor tan grande que tenía esa persona en tu vida. Tampoco veo correcto que la gente se vaya de tu vida así sin más, ya no voy a decir que de toda la gente que tiene oportunidad de desaparecer de tu vida, siempre se marches los que menos deben. 

+ ¿Te pasa algo? –No. + ¿Segura? –Sí.  +Te conozco demasiado. –Mejor. +Venga, ¿que te pasa?

-¿Qué que me pasa? Qué estoy harta, cansada. ¿Por qué? Porque estoy dándote todo, y cuando digo todo no hay ni una sola excepción. Porque una relación la tienen que llevar las dos personas, no solo una como lo estoy haciendo. Me preocupo por ti más que por mi ¿Y gano algo haciendo eso? Sí, gano perder el tiempo, perderme a mí, y dejar que se me pase la vida, mientras yo le regalo la mía a otra persona. ¿Pero tú no te das cuenta de todo lo que hago por ti? Dime, ¿Si fuera otra, aguantaría todo lo que yo aguanto? Te estás confiando, y yo te estoy consintiendo. Pero cambia, cambia ya, porque llegará un momento no muy tarde, que se acabarán las oportunidades. 

Lo mismo de siempre.

Mira, la vida no es de color de rosa. Es dura, y difícil, a veces por tú culpa y otras veces por cicatrices que guardabas del pasado. Me canso de las recompensas que van seguidas de disgustos. Me he dado cuenta que hay que luchar, uno solo, por lo que tú quieres no por lo que piensas que es más fácil y que te podría hacer feliz. Estoy harta de creerme a esa gente que te dice ‘’Estoy aquí, y voy a hacerte feliz’’. Son mentiras. A mí nadie me hace feliz, yo sonrío si quiero, y si puedo. Nadie está ahí para levantarme cuando me caigo, es todo una mentira. Están ahí para impulsarte, o para darte motivos para seguir adelante nada más.

Llegas a un punto que cuando creces, te das cuenta que hay que dejarse la piel, y la sonrisa de niña pequeña atrás porque ya no te sirve para formarte como persona fuerte. Y te planteas muchos errores, soluciones y problemas.

Nada es eterno, no.

Nada es eterno, y cuando digo ‘’nada’’ es nada, no hay ni una sola excepción que haga cambiarme de opinión. La verdad, es que no es bonito aceptarlo, ni y mucho menos fácil. Duele, duele y no poco. Pero supongo, que ya que es bastante duro de por sí intentar pasar página, es peor cuando nosotros mismos le ponemos más dificultades. Así que es mejor dejar las cosas como están, como las hayas dejado cuando te fuiste. Y recordar, que aunque ese acto nos haga el daño suficiente como para contar una por una las cicatrices del corazón, es mejor tener esos recuerdos ahí, porque son las acciones que un día has hecho con una persona y te han sacado una sonrisa, incluso varias, permanentes y sinceras.
Después de eso, de mentalizarte que hay que recordar y tener presente siempre el lado bueno de lo malo. 

Y plantearte tirar la toalla.

No voy a reprochártelo, porque nadie tiene la culpa. Pero que más da que siga luchando, desde aquí hasta ahí, si hoy por hoy no vale de nada. Para que voy a llorar por este obstáculo, si nadie va a venir a mí en ese momento me va a abrazar y decirme que ya está aquí conmigo, que ya se acabó. No es así, es una lucha constante, y la verdad, es que aunque no lo parezca, a veces cansa, te agota, te hace plantearte si tirar la toalla o seguir un poco más para ver si algo cambia.

Destino.

Yo al destino no le acabo de coger el truco. Creo en él, no creo en las casualidades, pero cada vez confío menos en él, me falla, me pierde, y me lía. Cuando me deja en frente de la puerta del camino que voy a andar el resto de mi vida, me juega una mala pasada, no me deja vivir y andar feliz , me tira al suelo y me machaca.
Sé que a veces, está bien caer y ver que te decepcionan pero, no siempre está bien. Y mi destino me está haciendo ver demasiadas decepciones, parece que le gusta ver como se me congela el corazón poco a poco. ¿Y después de todo este "mal rato"? ¿Queda mucho para que se acabe? ¿Sigo andando sola y ciega o me van a guiar? ¿Confío o desconfío? ¿Me quedan fuerzas o me las va a quitar todas? Me da miedo comprobar la respuesta.

Todo, si quieres.

Mira, la vida no es de color de rosa, ni tampoco negra. Es gris unos días y otros violeta. Se basa, en pasar días despacio. En verdad, solemos cambiar esa teoría por "pasar penas despacio y alegrías deprisa". Nos empeñamos en dar importancia a los malos ratos, solo sabemos quejarnos y ¿los buenos? los disfrutamos en su momento, se acabó. Quizás una de las etapas de la vida, es cuando estás rozando la libertad propia pero sigues con la liberta impuesta por tus padres. Adolescencia o final de ella. Nos quitan la venda de los ojos, y por eso pasamos los días tristes, ‘rayados’, y con 'la mi vida es una mierda'. Es causa, de que se nos viene la realidad de frente, y no es bonito ver que tus padres y hermanos te han mantenido alejado de esta verdad, te protegieron, y tú nunca te diste cuenta que así es la vida, con su sol y su lluvia. Sus más y sus menos. Ahora te toca ver más la lluvia, las tormentas, y la niebla. Y… ¿Verdad qué cuando llueve por mucho paraguas que lleves, te mojas si tú quieres? Esto es igual, aquí ganas o pierdes, si quieres, sufres o disfrutas, si quieres. 

Claro está, que a veces no es todo culpa nuestra, "la vida no es color de rosa", pero es por el destino que nos ilusiona, y luego frena en seco y nos cambia de dirección cuando ya teníamos un camino pensado para seguir. 

En fin, no sé en que se basa vivir, no sé que es, ni que hay que hacer para hacerlo de la mejor manera posible, se cómo se sobrevive y ya está. Intentaba explicarlo, pero me que he quedado en el intento, esto es un lío y un desastre...pero este lío hay que aprovecharlo antes de que se acabe y perdamos el tren para siempre. 

Cicatrices, siempre quedan.

Me podría pasar días y días escribiendo cosas malas que me han pasado, que he visto, que he pensado o simplemente que he rozado. Pero solo podría pasarme unos cuantos minutos diciendo las cosas buenas que he visto. Quizás no es así, lo que sí es verdad es que lo malo me ha dejado cicatrices y lo bueno lo máximo que me ha dejado para recordarlo son fotos. Aún no entiendo muy bien el concepto de ''cosas buenas vividas'' ni el de ''cosas malas vividas''.

Y lo que no entiendo es porque estoy dejando pasar los días, en busca y captura de un buen momento que me marque y me haga por unos segundos la persona más feliz del mundo, creo que mi fallo es que no paro de buscar esa alegría y que no me la doy yo, si no que estoy empeñada en que me la tienen que dar a mi la demás gente. Que fallo el mío al pensar eso. Otro fallo más para lista. Parece que en vez de vivir de oxígeno vivo de mis errores.

Eres tú.

A veces, creemos encontrar personas en las que puedes contarle toda tu vida, verso por verso porque te escuchan con paciencia, que nos podemos apoyar en ella, porque es un pilar de un material de calidad que nos sostiene y que jamás se derrumbará. Personas que nos hacen olvidar problemas o que son las que nos ayudan a ver las soluciones de cada conflicto que se nos plantea. Las que están ahí, sin nada a cambio y les debemos tantas cosas que no sabríamos por dónde empezar a darles las gracias. Son personas que te prometen, y que te fías de su promesa porque tienes la esperanza de que algún día cumpla lo que te ha dicho, porque ves que ‘’vale la pena’’.

Al final, todo camino tiene mínimo una piedra, que te hace cambiar de dirección o simplemente tropezar. Esta piedra, de este camino, de esta gente que para nosotros vale la pena, se llama ‘’mentira’’. La gente te falla, te rompe, y te hace daño. Da igual si te lo mereces o no, si te lo esperabas o no. La gente no cumple promesas, solo las dicen porque queda bonito decirlo. Nada más. Se cansan de darte cosas buenas. Destapan su corazón y se quitan la máscara. La gente no es buena. Y para ti, solo hay una persona que te conviene. Eres tú.

Holita Dani.

Hola Dani, Maru tiene mucha calidad y tu lo sabes ehh. Eres un bicho feo que lo sepas, pero Maru te odia muchichisisimoo. Eres un jirafante y por favor no crezcas más eh, deja un poquito a los demás. TELOVEVERYMUCH JAJAJAJAJA Firmado: tu crazy. :)

Noche de Reyes.

Prefería haberme quedado con 5 años y disfrutar de la magia de la noche de Reyes. Esa noche en la que no dormías por nervios, que lo único que querías era que llegará la mañana después de haber estado toda la noche pensando los regalos. Salir corriendo a la entrada para ver si se habían comido el polvorón y el vaso de leche, abrir la puerta del salón y encontrarse en el árbol, miles y miles de regalos, o ver el árbol vacío y jugar a la típica broma de buscarlos por toda la casa ya que están escondidos. Sentarse enfrente del árbol y empezar a abrir regalo, ese placer de romper el papel y encontrarte lo que habías escrito en la carta a los Reyes o algunas cosas que ni esperabas. Esas caras de alegría al ver todo aquello, esas ganas de estrenar todo. Esos momentos son los que me gustaría revivir o seguir viviendo. Pero llega una edad en lo que todo acaba y hay que poner los pies en el suelo, vivir la realidad.

Vive.

Aquí no valen los 'mi vida es una mierda' y las ganas de morirse, las lágrimas, las tristezas, los malos recuerdos, ni los Domingos quedándose en casa y las quejas a primera hora de la mañana. No vales las caras largas y las discusiones. Para ser feliz, solo hay que querer ser feliz y encontrar motivos para serlo. ¿Ves eso de ahí delante? Se llama vida y está esperando a que la conquistes. Te queda un largo camino por recorrer para terminarla, así que deja de pensar en quien no se lo merece, deja de darle oportunidades a quien no las sabe aprovechar, deja de intentar que todo el mundo sea feliz y seas tú la que siempre acabe jodida porque a veces nos olvidamos de lo más importante: ser uno mismo. Diviértete, ríete. Y si te duelen los pies al llegar a casa, es señal de que lo has hecho bien.

Defectos.

Tengo miles de millones de defectos, si. Soy tonta y me entero de cosas que no me gustaría enterarme. Soy incapaz de quedarme callada dos minutos, o de no reírme a veces cuando me cuentan algo serio. No tengo el mejor cuerpo, ni unos ojos preciosos, ni unos labios increíbles  A veces me vuelvo loca, y grito, muchas veces. Me pico, sin motivo, hay veces que me duran dos minutos, pero otras veces me duran días. Cuando me doy cuenta, que es una tontería, pido perdón y digo que nunca más volveré a hacerlo, pero todos seremos que dentro de una hora, volverá a pasar. No soy la más simpática, es más puedo llegar a ser de las más borde, pero sin embargo doy todo por quien quiero. Si me pillas de mala hostia puedo dejarte sin cuello, pero si me pillas de buenas, aunque no quieras sonreír, te aseguro, que sonreirás al ver mi sonrisa.

Obstáculos.

La vida es muy puta. Nos enseña a hostias. Nos quita a personas que realmente, nos hacen falta y no da a otras que solo van a ser obstáculos. Pero si a pesar de todo consigues superarlos y levantarte todas las veces que te caigas conseguirás ser feliz. Tienes que conseguir tu felicidad, ir fomando tu vida a base de escalones, que vas consiguiendo gracias a una lucha constante. Una lucha que dará tarde o temprano su recompesa.

No todo lo que reluce es oro.

No soy lo que parezco, puedo sonreír y estar muriéndome por dentro que sé que nadie se dará cuenta. Puedo estar en Marte y en Júpiter a la vez y los de fuera seguirán pensando que no me he movido. Son así de tontos, o yo así de lista. Estoy harta de que la gente se simplifique. La gente simple no existe. Todos jugamos a mil bandas, todos tenemos una cara para cada día guardada en cajones, sólo que algunas lo escondemos mejor que otras. No es que pueda sentir, es que siento. No es que viva, es que me encanta vivir. Me importa una mierda que la gente crea que soy de 'tal' manera. La mayoría ni siquiera lo cree, simplemente quieren creerlo. Porque así es más fácil. Es más fácil pensar que la de al lado es el problema antes de pararse a observar y a descubrir algo que probablemente no sea agradable. No soy perfecta. Pero tampoco lo contrario. Nadie lo es. Simplemente no soy lo que todos piensan, y me revienta que me tachen de algo cuando ni siquiera me dan la oportunidad de sorprenderles. No existe la gente rara, porque cada uno de nosotros es diferente a su manera. No existe la gente triste o la gente alegre, porque alguien se implante todos los días sonrisas antes de salir de casa no implica que sea la persona más feliz del planeta. No todo es lo que parece ser. Casi nada lo es. Así que, intenta leer entre líneas antes de creer que me conoces. porque te equivocas.

Lucha.

Puedes sentirte solo y estar en medio de un millón de personas, puedes gritar y que nadie te oiga, o preguntar y que nadie te conteste. Querer y no tener, luchar y no conseguir, pelear y no ganar, dar y no recibir. Pero ¿Sabes qué? Habrá otros momentos en el que estés solo pero te sientas rodeado de mil personas que te quiera. Sin decir nada, alguien sabrá que las cosas no van bien. Sin preguntar, te dirán lo que necesites oír, conseguirás cosas sin luchar, sobre todo aquellas que no quieras pero ganaras batallas sin dejarte la piel en el camino. Recibirás sin tener que dar nada a cambio. Y después de todo esto, alguien te enseñará que el único truco que sirve es SEGUIR ADELANTE Y SONREÍR pase lo que pase.

Soy así.

Soy de esas personas que no paran hasta conseguir algo, que si se caen se vuelven a levantar y tropiezan más de una vez con la misma piedra. Intento conseguir todo lo que me propongo, por muy difícil que sea aunque no haya ni la mínima posibilidad. Soy muy cabezota y quien me conoce bien lo sabe. Que si 2+2 son 4, soy de esas que apuestan porque quizás sean 6. Que no para hasta chocarme y darme cuenta de que me equivoco, que las cosas no son así. Soy de las que no les importa lo duro que pueda resultar a ser algo, de las que si se les mete una cosa entre ceja y ceja, apuestan por ello y persiguen sus sueños. A veces puedo llegar a ser una persona un tanto pesada, puedo llegar a preocuparme demasiado por ti o puedo llegar a pasar complentamente de todo lo que ocurra a mi alrededor. ¿Borde? Suelo ser borde cuando exploto, cuando una circustancia es superioir a mi. Puedo ser tu mejor sueño aunque en un abrir y cerrar de ojos puedo convertirme en tu peor pesadilla. Debo decirte que por las buenas soy muy buena, pero por las malas soy mejor. Puede que tal vez estoy muy enfadada pero al cabo de un tiempo se me olvida y prefiero empezar de nuevo, siempre suelo perdonar por muy grave que sea.  Que estoy muy loca, que no me avergüenzo de ellos. Me gusta ver a la gente sonreír, no soporto lagrimas de nadie. Puedo ser relativamente fácil y demasiado complicada a al mismo tiempo. que cojo demasiado cariño a la gente en muy poco tiempo, que daría cualquier cosa por ellas, que saben que incluso en mi peor momento ellos me tendrán ahí. Y luego por dar todo no recibes nada, lo máximo que puedes recibir es una gran puñalada por la que hacen daño y no se dan cuenta. No soy de llorar en público, sino que oculto mis problemas en una gran sonrisa. No me gusta ver a la gente preocupada por mi, aunque si veo a alguien mal intento sacar su mayor sonrisa, sea como sea pero hasta que no lo consigo no paro. Que me paso muchas noches sin dormir dándole muchas vueltas a las cosas y pensando hasta que termino llorando. Soy muy negativa, prefiero estar en las malas y llegar a las buenas, que estar en las buenas, fallar y desilusionarme.